martes, 17 de febrero de 2015

Caterpillar introduce nueva serie de minicargadoras

Con el propósito de reemplazar las minicargadoras de las series B3 y C, el fabricante estadounidense lanza al mercado la gama novedosa de productos que ofrecerá una visibilidad mejorada y un rendimiento más alto que los modelos anteriores.


Un rendimiento mejor


La serie D abarca cuatro modelos de cargadoras compactas cuyas capacidades de operación se extienden desde 816 kg hasta 1225 kg. Una característica de los modelos 236D y 242D es una anchura muy pequeña de tan solo 1524 mm. Los tres modelos está propulsados con el motor de 3.3 litros que produce 74 CV de potencia (55 kW) y aproximadamente el 8% más de par de torsión.


Novedades en la cabina


Una novedad de la serie D que seguramente les va a gustar a los operadores es nuevo diseño de la cabina que desde ahora incluirá muchas características cuyo objetivo ha sido hacer el entorno laboral del operado más cómodo. Para lograrlo se ha ofrecido la cabina presurizada con los sistemas de ventilación y aire acondicionado más eficaces. El asiento del operado ha sido modificado y ha adquirido suspensión neumática. Además, en los nuevos modelos el monitor de control de pantalla permitirá guardar hasta 50 preferencias del operador que incluyen el idioma, el color y estilo de indicador, configuración de los mandos, límites de velocidad etc.


Sistema de estabilización


En cuanto a las características técnicas la serie D contará con el acelerador electrónico que puede ajustar el número de rpm que regula la aceleración, especialmente cuando la maquina se encuentra en vacío. La regulación ayuda también en llevar a cabo maniobras precisas.
Otra introducción que se hace en la serie D es el sistema de nivelación inteligente, un mecanismo que abarca amortiguación eléctrica, nivelación automática y posicionamiento de herramientas. El sistema asegura que el trabajo realizado con las minicargadoras Cat sea óptimo: la autonivelación y posicionamiento regula los mecanismos de brazos, amortiguación disminuye el movimiento innecesario mientras que otras opciones permiten volver a los ajustes predeterminados, por ejemplo, cuando el operador quiere retornar a la excavación la máquina automáticamente establece los ángulos de los brazos y vuelve a la posición recordada.
El mismo diseño de los brazos se ha cambiado y a partir de ahora las minicargadoras de la serie D poseen un diseño tubular gracias a lo cual se logra una características técnicas perfectas y una resistencia óptima.  

Servicio facilitado



En cuanto al servicio, el proyecto rediseñado ahora hace más fácil el acceso a todos los puntos de servicio rutinarios como los filtros, entrada de aceite, la batería o el motor. Además, la nueva bomba de cebado con filtros de aire permite un reemplazamiento más fácil. 

martes, 3 de febrero de 2015

Las máquinas Volvo CE en la construcción de la autopista

No es nada nuevo ver unas máquinas de Volvo en una obra de construcción, ya sea de una carrera, de un edificio o de una autopista. A no ser que la autopista se construya en medio de uno de los desiertos más grandes y hostiles del mundo.

En medio del desierto 


En 2010 la empresa Al-Rosan Contracting fue elegida como un contratista para construir la autopista que uniría Arabia Saudí con Omán que mediría unos 520 km. Y si no fuera lo suficiente, un tramo de un carril con carriles adicionales en unas cuestas inclinadas, de “sólo” 255 pasaría por el desierto Rub´ al Khali, conocido como Cuartel vacío, el desierto de arena más grande del mundo. Para visualizarlo, las dunas más altas alcanzan allí aún ¡250 metros! Y todo ello en temperaturas de 50 ºC.
Para colmo, todo el terreno es movedizo y tachado por salinas. En este ambiente hostil y agresivo, remoto y con unas temperaturas extrema, más de 95 máquinas Volvo tuvieron que funcionar durante años.


Maquinas que aceptaron el reto 


El contratista saudí compró maquinaria de todo tipo, desde los volquetes articulados hasta las excavadoras. No obstante, no fue un equipo normal y corriente ya que había tenido que estar ajustado a las condiciones particulares. Además, durante 3 años del proyecto, en mitad de nada, trabajaron cientos de conductores, operadores de excavadoras, técnicos, trabajadores auxiliares. Cada día, trabajo de 14 horas, desde el alba hasta el anochecer cuando temperatura solía bajar hasta 0º C. El arena excavada fue depositada y compactada usando las aguas saladas naturales. Pero sobre todo dependía de las máquinas Volvo.


Tras tres años de proyecto, la carretera ya está completada y constituye una conexión crucial entre dos países árabes. Y más proyectos, como el AVE árabe todavía quedan por terminar.